domingo, 16 de diciembre de 2012

EL GRAN DERBI MALAGUEÑO VIVIDO EN ALAMEDA SE SALDA CON “TABLAS”



Racing Kallan Doors Alameda F.S.: 3
Dani, Xico, Chico, Angel y Reyes- (cinco inicial)-Chili, Remo, Crespo, Peter, Figueroa y Jonny.

Incosur Coineña F.S.:3
Cone, Fali, Fran, J.David y Coco- (cinco inicial)- Cepi, Daniel y Mini.

Goles: 0-1 Fali (min.2), 1-1 Chico (min.3), 2-1 Remo (min. 3´50) y 2-2 Mini (min.13). Primer T. 3-2 Remo (min. 11) y 3-3 Fali (min.16).Segundo Tiempo.

Árbitros: D. Andrés Sánchez Campano (Málaga) y D. David Silva Aparicio (V. Málaga).
                 Crono: Dña. Carolina Díaz Durán. (Málaga).
                Buena actuación arbitral dadas las circunstancias del partido y de la cancha.

Incidencias: 500 espectadores en el Pabellón Municipal de Alameda. Unos 80 aficionados llegados de Coín. Ambas aficiones de 10.
Han recibido tarjeta amarilla por parte local: Remo, Xico y Chico.
Han recibido tarjeta amarilla por parte visitante: Fran, Fali, Cepi, Daniel, Coco y Mini.


Llegaba la décimo cuarta jornada de Liga de la Segunda B, y con ella el DERBI malagueño tan deseado por jugadores, cuerpo técnico y aficiones de uno y otro equipo. Atrás quedarían desagradables momentos vividos en temporadas anteriores por una y otra afición, y en el Pabellón Municipal de Alameda todo estaba dispuesto para que se viviera una gran tarde de fútbol sala.

Tanto el Racing Alameda F.S. como el Incosur Coineña F.S., sabían de la importancia de este partido y de la necesidad, el primero, de romper la racha negativa que arrastraba en las últimas jornadas, como el segundo, de cosechar victorias fuera de su feudo, y así lo demostraron en los primeros lances de juego con ocasiones para ambos equipos: una gran parada en el minuto uno de Cone y el  primer aviso de Fali que se iba fuera por milímetros. El Incosur Coineña F.S. defendía en media cancha, saliendo en contras rápidas con hombres como J.David y Coco, y sería ya en el minuto dos cuando Fali abriese el marcador con un punterazo al borde del área, imposible de parar por el guardameta local Dani. La respuesta racinguista no se hizo esperar y en una jugada llevada por el hombre clave de este equipo, Chili, que dando un pase perfecto en diagonal, puso el esférico a los pies de su compañero Chico, que sólo ante Cone, en el segundo palo, lo batió por bajo, llevando por tanto el empate 1-1 al luminoso del Pabellón Municipal de Alameda.

Seguía el partido con la misma intensidad, defendía la Coineña muy fuerte y obligaba al Racing Alameda F.S. a jugar por fuera y así, de un disparo sin peligro aparente, es como Remo pondría el 2-1 a favor del Alameda en un exceso de confianza del guardameta Cone, siendo éste el único fallo en todo el partido del gran portero coineño.

Con el paso de los minutos la Coineña se afianzaba en su juego de toque y conseguía llevar el partido por donde más le interesaba, jugando en ¾ de cancha propia y obligando al rival a salir más para buscar el balón, dejando más espacios en defensa, lo que aprovechó Pepe Martin para meter a su jugador Cepi en el partido, ya que con su velocidad conseguía desconectar a la defensa racinguista y obligándoles  a cargarse de faltas ( la quinta a falta de diez minutos del primer tiempo). La entrada de Mini también daría más consistencia a la defensa por el centro y sería en un robo perfecto de balón del propio Mini, que marchándose en solitario hacia la porteria que defendía Dani, batía a éste de un buen disparo, poniendo el empate 2-2 en el marcador, con el que se llegaría al final de la primera parte.

 Con la reanudación del encuentro se producirían algunos cambios tácticos: el más destacable sería el marcaje flotante que hizo Fran, el gran capitán coineño, sobre Chili, el hombre racinguista, en zonas de influencia de este jugador para su equipo, lo que atascó el juego del Racing Alameda F.S., ocasionando que ellos llegaran con menos peligro a la portería de Cone, y lo que daría más libertad a Fali para desarrolar su juego, siendo éste el mejor del partido.

No obstante el Racing Alameda F.S., lo seguía intentando con disparos desde fuera, de ahí que Cone demostrara con grandes paradas, el gran momento de forma que atraviesa esta temporada.

A partir del  minuto diez de juego de la segunda parte, la cancha del Pabellón Municipal de Alameda, se puso peligrosísima para ambos equipos, debido a la humedad, haciéndose impracticable el fútbol sala en ella. Este hecho impidió que jugadores como Cepi, Coco o J.David pudieses salir en velocidad en varias jugadas  que la Coineña iniciaba, terminando siempre éstos hombres en el suelo. Entre caída y caida llegó el tercero del Racing Alameda F.S., en  una falta lateral al borde del área que Remo tras varios rechaces consigue hacer gol (3-2). No se hizo esperar la reacción del banquillo coineño, sacando en el minuto 15 de la segunda parte a Fali como portero- jugador y consiguiendo éste mismo el gol del empate (3-3), lo que desataría la locura entre los aficionados de Coín.

En los minutos finales pudo el Racing Alameda F.S., llevarse el partido, tras la sexta falta y la ejecución del doble penalti, que majestuosamente detiene Cone, con lo que rubricó su gran tarde.

Con este resultado se llegaría al final del encuentro, con un justo reparto de puntos para ambos equipos, después de un gran partido de fútbol sala.

 De este partido destacar tres puntos:

1)     Las aficiones que apoyaron a sus respectivos equipos con máximo respecto y civismo. Lo que reconocieron todos los jugadores y respectivos cuerpos técnicos que al finalizar el partido fueron a saludar a dichas aficiones.

2)     El trabajo llevado a cabo por las Directivas y Presidentes de ambos Clubes, para que todo se diera y transcurriera como sucedió.

3)  Los Arbitros, Malagueños que supieron estar en cada momento a la altura de este derbi , no dejándose influenciar por el ambiente que se encontraron, desde aquí darle la mas sincera enhorabuena por pasar casi desapercibidos en todo el transcurso del encuentro.


                                                                                                                            
                                                                                                                                Pepe Martín